Samuel Armijo "Un todo caminos sin plan prever"
Samuel Armijo // @DesdeLaBarrera
José Cervera cumplió el pasado mes de mayo 30 años. Su cuna granadina se confunde por su acento universal pues pronto dejaría el Granada 74 para sumergir a un submarino amarillo su futuro en el fútbol. En Villarreal, siendo juvenil, coció junto a sus compañeros el ascenso en La Victoria de 2009 aunque con él peloteando ya para el RCD Español B. Antes, Baza y el histórico Granada CF en un vestuario rojiblanco con Israel Jerez y un Lorenzo Zúñiga venido a menos.
Está claro que sí su corazón late también late el del Real Jaén. Perro de presa con andares de yorkshire, vocifera y argumenta cada instrucción a uno de sus compañeros. Cuando activa su periquito de riego al equipo rival le toca bascular. Pases de treinta metros en uno y otro sentido que no hacen olvidar su responsabilidad en cobertura a los laterales.
Orihuela, Maracena, Écija, Ontinyent y Cacereño previa llegada a Mancha Real donde se doctora con 28 barbas en la madurez del fútbol. Al ascenso en el Ruta de la Plata le argumenta todo el fútbol del mundo en la media para subirse a la tarta zamorana y colocar la guinda. Su trabajo en el grupo IX le permite ser el primer nombre escrito en el folio en blanco de la pretemporada en el grupo IV. De más a menos, como su Mancha Real, dio con el asombro de un descenso impensable en la primera vuelta.
Este pasado verano decide que su viejo Mercedes gire a la izquierda en lugar de a la derecha en la autovía origen Sierra Nevada. El RJ es, probablemente, su última ITV en primera línea de fuego. Con años y juego por delante, sabe que el equipo de la capital no entiende de categorías y es destino puntero en un viaje sin retorno.
Su tranquilidad expresándose determina que ha vivido todo en un vestuario y que las urgencias de otoño sólo se apagan con trabajo y cerrando la boca. Conoce su capacidad y no es difícil pensar que en la última jornada será de los futbolistas más utilizados por el entrenador durante la campaña. Defiende a sus compañeros, a su técnico y a la manera de jugar manteniendo el grupo como un refugio antiaéreo y no le escuece tener que alargar su esfuerzo una carrera por tapar el hueco de otro de blanco.
Cervera no habla de sueños, habla de objetivos. Su objetivo a cierre de temporada lo tiene claro: volver a Granada en su viejo Mercedes con una estrella de Segunda B.
José Cervera cumplió el pasado mes de mayo 30 años. Su cuna granadina se confunde por su acento universal pues pronto dejaría el Granada 74 para sumergir a un submarino amarillo su futuro en el fútbol. En Villarreal, siendo juvenil, coció junto a sus compañeros el ascenso en La Victoria de 2009 aunque con él peloteando ya para el RCD Español B. Antes, Baza y el histórico Granada CF en un vestuario rojiblanco con Israel Jerez y un Lorenzo Zúñiga venido a menos.
Está claro que sí su corazón late también late el del Real Jaén. Perro de presa con andares de yorkshire, vocifera y argumenta cada instrucción a uno de sus compañeros. Cuando activa su periquito de riego al equipo rival le toca bascular. Pases de treinta metros en uno y otro sentido que no hacen olvidar su responsabilidad en cobertura a los laterales.
Orihuela, Maracena, Écija, Ontinyent y Cacereño previa llegada a Mancha Real donde se doctora con 28 barbas en la madurez del fútbol. Al ascenso en el Ruta de la Plata le argumenta todo el fútbol del mundo en la media para subirse a la tarta zamorana y colocar la guinda. Su trabajo en el grupo IX le permite ser el primer nombre escrito en el folio en blanco de la pretemporada en el grupo IV. De más a menos, como su Mancha Real, dio con el asombro de un descenso impensable en la primera vuelta.
Este pasado verano decide que su viejo Mercedes gire a la izquierda en lugar de a la derecha en la autovía origen Sierra Nevada. El RJ es, probablemente, su última ITV en primera línea de fuego. Con años y juego por delante, sabe que el equipo de la capital no entiende de categorías y es destino puntero en un viaje sin retorno.
Su tranquilidad expresándose determina que ha vivido todo en un vestuario y que las urgencias de otoño sólo se apagan con trabajo y cerrando la boca. Conoce su capacidad y no es difícil pensar que en la última jornada será de los futbolistas más utilizados por el entrenador durante la campaña. Defiende a sus compañeros, a su técnico y a la manera de jugar manteniendo el grupo como un refugio antiaéreo y no le escuece tener que alargar su esfuerzo una carrera por tapar el hueco de otro de blanco.
Cervera no habla de sueños, habla de objetivos. Su objetivo a cierre de temporada lo tiene claro: volver a Granada en su viejo Mercedes con una estrella de Segunda B.
Comenta