"Castillo, mi padre, fue un gran jugador y como persona siempre bromeaba"

Samuel Armijo // @desdelabarrera    

Manuel Castillo Montávez (Linares, 1995) es hijo de Castillo, jugador en los años 70 de Real Jaén y Linares CF. Con sólo 68 años, una terrible enfermedad le ha arrebatado de forma fulminante a su padre en apenas unos meses. Utrerano de nacimiento, el patriarca disfrutó de la Primera División debutando en San Mamés con la AD Almería y participó en la histórica temporada de Segunda 76-77 donde el Real Jaén rozó la máxima categoría. Echó raíces en Linares donde una recepcionista de Hotel lo enamoró contagiando los años azulillos más gloriosos de la categoría de plata. Ahora su hijo pelea para hacerse un sitio en Mancha Real llevando por bandera el apellido de su padre. A mitad de conversación me siento verdaderamente responsable de que sus ojos nos miren en cada respuesta envueltos en lágrimas pero me hace valorar la valentía de un deportista para afrontar algo así. Manu Castillo tiene la generosidad de desplazarse para el encuentro y de compartir su dolor en uno de los momentos más duros que padecerá su vida. Una charla con tres sillas pero de cuatro cafés. En nuestra memoria, DEP.

Samuel Armijo    La entrevista    Manu, te acompaño en este momento tan delicado. ¿Cómo ha sido tu padre?

Era una persona muy bromista, siempre estaba de cachondeo cuando jugaba con los compañeros en el vestuario y en su vida con toda la gente. Jugó en el Real Jaén y después en el Linares CF, conoció a mi madre que era recepcionista del Hotel Victoria y allí formó su familia. Nosotros no solíamos hablar de fútbol sólo después de mis partidos me daba algún consejo, me corregía. Normalmente no me comentaba demasiado porque me decía que yo ya sabía lo que tenía que hacer, que me divirtiese y marcara goles como en el callejón donde jugaba de niño detrás del Hotel Aníbal.

Siempre estuvo muy vinculado a mí, me llevó a Sevilla tres veces a la semana los tres años que estuve jugando en la cantera del Betis, vino a vivir conmigo a Elche y cuando jugaba en los equipos de la provincia me veía todos los partidos.  

-¿Pudo influirte para que tú fueras futbolista también?

Pues lo cierto es que no, nunca me dijo nada pero si me seguía e insistía es porque veía que podía valer, siempre me dijo que me veía cosas y de lo contrario lo hubiera dejado. Empezó siendo mi entrenador de fútbol sala en la Asociación San José y después me fui al Santana hasta que me llamó el Betis, entrené una semana y me ficharon. 

Yo llevaba tres años en Sevilla y un día me fui a Madrid con mi hermano a ver la presentación de Cristiano en el Bernabéu, cuando volvimos a casa era tardísimo, mi padre estaba en la cama pero me llamó y me preguntó que cómo me lo había pasado. Le contesté que genial, que el Estadio era una maravilla y me dijo "pero a ti ¿dónde te gustaría jugar algún día?" yo le dije que en el Real Madrid y me dijo "pues hoy han llamado y vas a jugar allí". ¡Esa noche no dormí!

El Madrid llevaba tiempo siguiéndome, yo era Cadete, pero el Betis no me quería "soltar" y mi padre me echó un cable teniendo que "mentir piadosamente" incluso a mi familia. Al club le dijo que yo me iba para Linares a estudiar y que lo dejaba y la familia, siendo mi padre de Utrera, imagínate nos iban a matar al querer irnos del Betis.

En la capital maduré muchísimo, fui el máximo goleador de mi equipo. Recuerdo un fin de semana que el club nos invitó al Estadio para ver al primer equipo, nos fuimos en el autobús y se me olvidó el carnet, íbamos sin responsable así que me tuve que ir a un bar de los alrededores, con 13 años, y ver el partido yo sólo desde la tele con un golazo de falta de Ronaldo. Aunque pude resarcirme, esa temporada se jugaba la final de la Champions en el Bernabéu y el Madrid nos puso en el césped a algunos canteranos a mover la lona. Cuando miraba hacia arriba...

-Sería inevitable pensar en la posibilidad de marcar algún día ahí.

Claro que lo piensas. Como te digo fui el pichichi con compañeros como Marcos Llorente, Enzo Zidane pero, inexplicablemente, no quisieron que continuara. Mi comportamiento era bueno, en el vestuario, en los estudios...incluso cuando me dieron la noticia y salí de la oficina me vio mi entrenador y me dijo "¿es que no sigues? ¡pero si he dado informes inmejorables!".

-Hablabas de Cristiano, ahora se va.

No me gusta nada que se vaya. "Llegamos el mismo día", yo fui a Madrid a verle en su presentación sin saber que jugaría allí así que siempre lo recordaré.

-Sales de Valdebebas rumbo a Almería.

Si, estuve muy a gusto, mis padres vinieron conmigo a un piso en el Zapillo y fueron meses positivos, no tanto como en Elche. Firmé por el Alicante, yo estaba acostumbrado a las canteras, con niños digamos "escogidos" y fue mi peor año en lo deportivo.

-Y luego Linares.

Mi padre era amigo de Torres padre y habló con su hijo de la posibilidad de ir. Me conocía y me incorporé al filial, siempre entrené con el primer equipo y jugaba la Copa. Después Martos, Torredonjimeno y Villarubia de Ciudad Real.

-Pero has vivido mucho para la edad que tienes.

Sí, he aprendido de todos los equipos, siempre se aprende algo y espero que siga aprendiendo.

-(Kike Bonoso) Por cierto, ¿ves mucha diferencia del Grupo IX al Castellano- manchego de Tercera?

Sí, en este puede ganarte cualquiera, allí hay cuatro equipos fuertes. El grupo de los equipos de la provincia es muy competitivo y te pelea cualquiera.

-Y ahora en Mancha Real estás a gusto.

Sí. Mi hermano conocía a "Rizos", el entrenador, y me llamó para decirme que contaba conmigo. La temporada pasada no hicimos buena primera vuelta pero luego ganamos nueve partidos seguidos. Estoy contento con la directiva, afición, compañeros...

-Debe ser complicado motivarte habiendo soñado en el Bernabéu.

Mira, mi padre siempre me decía algo "nunca sabes quién te está viendo" así que no te puedes rendir.

-Este puede ser tu año.

Yo creo que este debe ser mi año. Si antes tenía motivos, ahora tengo muchos más.

-Pues a ello. Enormemente agradecido, Manu.

Gracias a ti, Samuel.