Conclusiones equivocadas
El futbol, dice Jorge Valdano, es un estado de ánimo y ello influye directamente en el rendimiento en un partido aunque también es organización colectiva y mucha práctica. Si algo tiene un equipo de Juan Arsenal es precisamente eso, implicación diaria para implantar un sistema de trabajo que repercuta en el fin de semana. Pero después del verano que ha tenido el Real Jaén parece que la hinchada debe conformarse con ver a su equipo vivo y compitiendo.
Al conjunto blanco le faltó en Torre del Mar todo lo que caracteriza a un esquema del técnico de Hellín, gobierno de los partidos, presencia en campo contrario, opciones por dentro y mucho vuelo por fuera. En la primera parte no salió goleado de milagro y esos 45 primeros minutos sólo sirvieron para certificar una pretemporada para olvidar y que este equipo tiene portero.
Arsenal insistía a sus jugadores, especialmente a David Moreno, que realizaran una presión alta a la salida del meta del equipo local pero hubo desajustes permanentes propios de la falta de un periodo natural anterior. Juan Carlos, Pekes y Moreno iban al fondo pero el Torre del Mar se las ingeniaba para encontrar a los centrocampistas, salvar esa presión y ser vertiginoso hacia la meta rival. El Real Jaén se veía desbordado en cada acción, empotrado contra su portería y sin opciones de hilvanar tres pases seguidos.
El técnico blanco, con su alineación, pretendía dar mucha altura a Montiel por derecha y Fran Moreno por izquierda pero ambos frecuentaron más el área propia que la extraña y Urri, Ezequiel y Moha no se bastaban para impedir las sacudidas capitaneadas por el local Pulga. En el medio, muy solo Lara, un jugador más que interesante pero que encontró todo un océano a su alrededor con muchos compañeros por delante y muchos por detrás pero desconectados absolutamente de la media.
“Es lo que hay”
Es una afirmación muy de moda para estos días y el Real Jaén dispuso en la Costa del Sol de atacantes que son útiles cuando se tiene mucha posesión y se vive en campo rival. Armero, Juan Carlos y David Moreno se veían en terreno de nadie mientras tenían que regresar de nuevo para sofocar a sus compañeros en la retaguardia.
Imaginamos que el partido que Arsenal tenía en la cabeza era muy diferente con mucha más presencia de Armero por dentro, Juan Carlos, cambiado de pierna, conectando con éste y Montiel apoderándose de todo el carril derecho. Ya en la salida de pelota tuvo problemas el conjunto visitante y es que Jesús se veía obligado a sacar en largo para buscar aire más que a algún compañero.
Los cambios no aportaron mucho y sólo un regalo de los locales metió al RJ en el partido. Se había jugado una hora de encuentro y el equipo del Santo Reino estaba dentro después de haber podido ser goleado: fútbol.
Los blancos arrearon con escudo más que con otra cosa pero un justo penalti cerró el choque y deja al Real Jaén con menos tres en la clasificación y aunque solo ha jugado un partido la tabla ya le reclama auxilio a gritos.
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