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Sergio Cruz "No se cuando, pero volveremos"

Sergio Cruz // @Califajaen     Todo el año viviendo en una ruleta rusa solo podía terminar de una manera. Sin ascenso.

Tres entrenadores y con ninguno el equipo ha tenido un patrón de juego. Con Valenciano la afición estalló en Antequera, a Salva Ballesta le cubrió una enorme racha de resultados hasta que salió por su cuenta dando un ejemplo y una clase de lealtad hasta llegar al actual Ándres García Tebar, el cual el equipo ha carecido de ataque y de ideas.

Ahora la directiva si podrá ponerse manos a la obra para volver con un proyecto más serio sin necesitar dos plantillas. Desechando jugadorazos de la plantilla para traer paquetazos, y los que pudieron salir y finalmente no salieron . Punto aparte y mención merece el banquillo. El cual se ha seguido teniendo conversaciones con otro técnico cuando todavía no se había jugado el tan disputado Huétor Vega - Real Jaén.

Ahora ibamos al Paquito Giménez a ganarle al equipo local con su juego y en su campo. Precisamente donde ellos son más fuertes haciendo eso mismo. Pero bueno, el 1-1 de la ida decían que no era malo...

Veremos haber si el actual técnico no sube un escalafón y un granadino de nombre Germán Crespo no termina por venir. El cual parecía tener ofertas de categorías superiores pero aún suena en el banquillo lagarto. La historia del nunca acabar.

Es pronto y seguro que el calentón también influye, pero esta desastrosa temporada debería de pesar también en la directiva. Zapatero a tus zapatos y metiendo gente entendida de fútbol, pero de verdad, no de los que fichan viendo chilenas de un tipo por you tube.

Había plantilla para mucho más que para lo visto en todo el año. Y plantilla como para haber superado al Socuéllamos o al que se pusiera por delante. Pero un equipo incapaz de tirar a puerta más de una vez en 180 minutos tiene un problema grave. Y más cuando tu delantero centro juega en banda y la única que tiene dentro del área la enchufa. 

Habló como aficionado, como seguidor que sufre por un escudo acompañado de su padre. Hablo como uno de los aficionados que hoy han soportado el agua caída en Socuéllamos y aún empapados de pies a cabeza soñábamos con un gol que nos hiciera creer.

Llegamos con pinzas a la última jornada aprovechando dos regalos (uno del Motril y otro del Huétor) y celebramos la clasificación por todo lo alto, algo que era una obligación. Somos el Real Jaén, muchos no han estado ni están a la altura de un equipo casi centenario. Otro año más en Tercera.

No se cuando, pero volveremos.


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